CONSULTORÍA BIOCLIMÁTICA
TÉCNICAS PASIVAS Y ACTIVAS

A man sitting on the roof overhang of an eco home in the desert landscape.

Diseñar una vivienda o un edificio con criterios bioclimáticos es construir un espacio respetuoso con el medio ambiente, que responda a las fluctuaciones del clima con el que está en contacto y donde el usuario se encuentra en unas condiciones de confort óptimas.

Para conseguir que una edificación cumpla con todos estos requisitos es importantísimo diseñar de acuerdo con la climatología del lugar. La forma de la construcción, la envolvente de la misma, el tipo de aberturas que presenta o el sombreamiento que necesita nunca será igual para una vivienda situada en Lanzarote que para una situada en el norte de Tenerife. Este tipo de técnicas, que tratan de mitigar los efectos adversos del clima sin un gasto asociado de energía se llaman técnicas de diseño pasivo.

Si se aplican de forma correcta estas técnicas es posible conseguir un edificio de energía casi cero. Este tipo de edificios tratan de consumir la menor cantidad de energía posible, de forma que sean capaces, a través de la instalación de energías renovables, de producir, al menos, la misma cantidad de energía que demandan.

Debido a que en las Islas Canarias el clima es muy amable, si se tienen en cuenta algunos factores resulta «fácil» diseñar edificios de estas características. El elemento pasivo más importante casi siempre será la ventilación. Debido a que el archipiélago está rodeado por el mar, la humedad relativa es muy alta, y ventilar para que el aire con exceso de vapor de agua se renueve es fundamental. Además, debido a la alta incidencia solar, también será imprescindible sombrear los huecos y tratar de forma adecuada las cubiertas, al ser el elemento más sometido a los rayos del sol.

En climas muy extremos será necesario, además de usar técnicas pasivas, emplear técnicas de diseño activas. Estas técnicas emplean tecnologías que requieren consumir energía, como puede ser la calefacción o la refrigeración con la que cuentan muchas de las viviendas de España.

Dada las bondades del clima canario, con un muy buen diseño bioclimático y con el uso de las técnicas pasivas, muy raramente será necesario implementar técnicas activas. Sin embargo, en el caso de que de forma excepcional haya que usarlas, es importante que la energía que requieran venga de fuentes renovables y así, seguir diseñando una vivienda o edificio 100% respetuoso con el medio ambiente y que produzca la energía que necesita consumir.

En Ecomimética te ayudamos a diseñar espacios donde sentirte en confort térmico de acuerdo con tus gustos y necesidades, espacios que a su vez fluyen con el medio y con la naturaleza que les rodea.

BIENVENIDOS A ECOMIMÉTICA

forest

¡Hola, bienvenidos!

Una debe sentirse una privilegiada cuando puede dedicar su vida profesional a lo que le gusta. Si además de poder desarrollar tu vocación, el trabajo que realizas aporta valor a la sociedad y al medio ambiente, entonces la satisfacción es todavía mayor.

De ahí surge la idea de Ecomimética, un proyecto con el que nuestro equipo se desarrolla profesionalmente, pero sin perder de vista la idea de aportar valor a lo que hacemos.

Como consultoras ambientales ofrecemos herramientas a administraciones, empresas y ciudadanos con las que reducir su huella ecológica, contribuyendo así a la reducción de impactos ambientales negativos. Dentro de este área estamos especializadas en huella de carbono, evaluación ambiental, restauración de espacios degradados, sistemas de gestión y ahorro y eficiencia energética. Estas son nuestras especialidades, pero como expertas en medio ambiente y energía podemos ofrecer asesoramiento en otros proyectos relacionados.

Si te interesan nuestros servicios, ponte en contacto con nosotras.

Piscinas Ecológicas

Las piscinas ecológicas son una alternativa poco conocida pero muy atractiva frente a las convencionales, empleando plantas como elemento depurador. En este tipo de sistema no es necesario ningún tipo de producto químico que actúe como agente desinfectante, ya que son las plantas las que desempeñan este papel.

No hay que dejarse engañar pensando que la piscina ecológica es un estanque. A diferencia del mismo, este sistema tiene la zona de baño y la zona de depuración (donde se ubican las plantas) claramente diferenciadas, proporcionando un agua tan cristalina como en las piscinas convencionales a la vez que un espacio verde anexo a la piscina gratamente atractivo.

Este tipo de sistemas requiere que un 30% de la superficie total de la piscina se destine a la depuración del agua (zona verde). No necesita una gran profundidad, bastaría con 1,50 metros, y la bomba debe funcionar entre 6 y 12 horas al día, dependiendo del clima y la estación del año.

Las piscinas convencionales usan productos químicos abrasivos que pueden producir alergias o incomodidad en nuestra piel, ojos o sistema respiratorio, especialmente en niños o ancianos. El diseño de las piscinas ecológicas se basa en comprender la relación natural entre el agua, la flora y la fauna, y crear un espacio saludable libre de tóxicos, en un entorno verde que sin duda mejora la experiencia del baño.

Cubiertas Vegetales

Las cubiertas vegetales permiten el desarrollo de la vegetación en la parte superior de las edificaciones. Un techo verde puede llegar a ser autosuficiente cuando se realiza un estudio exhaustivo de la climatología del lugar y de las plantas que se elijan, de tal forma que se adapten perfectamente al lugar y sus necesidades se vean satisfechas por lo que les aporta el medio.

Dentro de este tipo de sistemas se diferencian dos tipologías diferentes, atendiendo a las necesidades de mantenimiento y al tipo de vegetación elegida:

  • Cubiertas extensivas o ecológicas: Este tipo de cubierta requiere de un substrato de menos de 10 centímetros donde se sembrarán plantas de bajo porte y poco mantenimiento, generalmente vegetación autóctona y tapizante.
  • Cubiertas intensivas o ajardinadas: El substrato de este sistema tiene un espesor considerable, aproximadamente 20 centímetros, de forma que permite el crecimiento de vegetación de alto porte, como arbustos y árboles. Requiere de un sistema de riego y mantenimiento similar al de un jardín tradicional.

Estos ecosistemas presentan beneficios similares a los de un jardín vertical. Fomentan la biodiversidad, ayudan a purificar el aire y a regular la temperatura ambiente, protegen la edificación sobre la que se construyen frente a las inclemencias del tiempo e incrementan la salud de la población.

  • Fomentan la biodiversidad: El diseño de la cubierta vegetal que realiza Ecomimética trata de crear un ecosistema capaz de regularse por sí mismo, que además atraiga a fauna que, de otra forma, nunca habitarían en un entorno urbano.
  • Purifican el aire: Las cubiertas vegetales absorben las partículas de CO2 y las transforman en O2, limpiando el aire que respiramos. Solo 1 m2 de jardín es capaz de asimilar entre 4 y 15 kg de CO2 anualmente, dependiendo del tipo de planta sembrada. 
  • Protegen la edificación: La vida útil de nuestras edificaciones se ve reducida de forma considerable por la incidencia solar recibida sobre ellas, siendo el punto más crítico la cubierta del edificio. Instalando una cubierta vegetal este efecto se reduce notoriamente, ya que añades capas sobre la cubierta que la protegen frente a los rayos del sol. Además, la vegetación ejerce como barrera de sonido, pudiendo reducir el ruido interior en hasta 10 dB.
  • Combaten el efecto de isla de calor: Hoy en día uno de los grandes problemas de las ciudades es la isla de calor. Las cubiertas vegetales se presentan como un elemento clave para combatir este efecto, absorbiendo parte de la radiación solar recibida e impidiendo que se vuelva a emitir por la noche a la urbe.
  • Cierran el ciclo del agua: Este tipo de soluciones recogen y aprovechan una cantidad considerable del agua de lluvia, que de otra forma acabaría en el sistema de alcantarillado sin uso y fomentando el colapso del mismo.
  • Mejoran la salud: Cada vez se tiene más claro que la salud y la naturaleza están estrictamente vinculadas. Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, para vivir en un entorno saludable le debería corresponder a cada persona entre 10 y 15 metros de espacio verde. Por este motivo las cubiertas vegetales son soluciones muy interesantes, ya que aportan un espacio verde transitable sin quitarle espacio a las edificaciones.

Jardines Verticales

Los jardines verticales son construcciones verdes asociadas a las fachadas de nuestras edificaciones, que además de ser sumamente vistosos, presentan numerosos beneficios para nuestro bienestar y para la salud de la pared sobre la que se construye.

Aunque es lo más común, no solo se pueden instalar en muros exteriores, también es posible construir estos sistemas en lugares interiores consiguiendo así espacios más saludables y atractivos.

Estos ecosistemas presentan beneficios similares a los de una cubierta vegetal: fomentan la biodiversidad, ayudan a purificar el aire y a regular la temperatura ambiente, protegen la edificación sobre la que se construyen frente a las inclemencias del tiempo e incrementan la salud de la población.

  • Fomentan la biodiversidad: Los jardines verticales que diseñamos y construimos en Ecomimética crean un ecosistema completo capaz de regularse por sí mismo, y para ello contienen la mayor cantidad de especies posibles. Todas estas plantas atraerán a fauna que, de otra forma, nunca habitarían en un entorno urbano.
  • Purifican el aire: Estas paredes verdes absorben las partículas de CO2 y las transforman en O2, limpiando el aire que respiramos. Solo 1 m2 de jardín es capaz de asimilar entre 4 y 15 kg de CO2 anualmente, dependiendo del tipo de planta sembrada.
  • Mejoran las condiciones de bienestar interior: Se ha demostrado que estos sistemas actúan como sistemas de enfriamiento pasivo con un espesor no superior a 9 cm. Actúan impidiendo que la radiación solar penetre en el interior de nuestra edificación, evitando el sobrecalentamiento y, también en sentido contrario, disminuyendo la transmisión de energía hacia el exterior, reduciendo así las pérdidas energéticas. Además, el jardín ejerce como barrera de sonido, pudiendo reducir el ruido interior en hasta 10 dB.
  • Combaten el efecto de isla de calor: Hoy en día uno de los grandes problemas de las ciudades es la isla de calor. Los jardines verticales se presentan como un elemento clave para combatir este efecto, absorbiendo parte de la radiación solar recibida e impidiendo que se vuelva a emitir por la noche a la urbe.
  • Mejoran la salud: Cada vez se tiene más claro que la salud y la naturaleza están estrictamente vinculadas. Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, para vivir en un entorno saludable le debería corresponder a cada persona entre 10 y 15 metros de espacio verde, y es por ello que los muros verdes son la solución idónea para las ciudades, ya que aportan el espacio verde necesario sin quitarle espacio a las edificaciones.

En Ecomimética estamos avaladas por Paisajimo Urbano para el diseño y construcción de estos ecosistemas, una de las empresas con más prestigio y reconocimiento a nivel mundial en este sector, y contamos con los conocimientos y la experiencia para ayudarte a conseguir el jardín que siempre has soñado.

Restauración de Espacios Degradados

La restauración de espacios degradados es el proceso que trata de reducir, mitigar e incluso revertir los daños producidos en el medio natural de un proyecto o actividad para intentar volver al ecosistema original. Para ello deben restituirse las condiciones originales y corregirse los impactos ambientales derivados de una determinada actividad.

La restauración de espacios degradados, la recuperación de hábitats para la fauna o la restauración paisajística forman parte de las diferentes metodologías que el equipo de Ecomimética utiliza para la mejora ambiental de espacios en estado avanzado de deterioro.

La restauración ambiental de espacios degradados suele estar asociada a actividades tales como el cierre de graveras o canteras, el deterioro de determinados espacios naturales o el sellado de vertederos.

Vigilancia y Seguimiento Ambiental

Entendemos la vigilancia y el seguimiento ambiental como el control de aquellos indicadores que permiten comprobar la correcta ejecución de un determinado proyecto desde un enfoque de protección del entorno.

La vigilancia y seguimiento ambiental tiene su origen en el propio programa de vigilancia ambiental, que es el sistema que garantiza el cumplimiento de las medidas preventivas, correctoras y compensatorias contenidas en un EsIA, tanto en la fase de ejecución como en la de explotación. Por tanto, hablamos de vigilancia y seguimiento ambiental como la ejecución efectiva del programa de vigilancia ambiental.

Este programa atenderá a la vigilancia durante la fase de obras y al seguimiento durante la fase de explotación del proyecto.

¿Cuáles son los objetivos de la vigilancia ambiental durante la fase de obras?

¿Cuáles son los objetivos de la vigilancia ambiental durante la fase de obras?

  • Detectar y corregir desviaciones con relevancia ambiental respecto a lo proyectado en el proyecto de construcción.
  • Supervisar la correcta ejecución de las medidas ambientales.
  • Determinar la necesidad de suprimir, modificar o introducir nuevas medidas.
  • Vigilancia de la evolución de los elementos ambientales relevantes.

¿Cuáles son los objetivos de la vigilancia ambiental durante la fase de obras?

¿Cuáles son los objetivos del seguimiento ambiental durante la fase de explotación del proyecto?

El EsIA determinará la extensión temporal del seguimiento teniendo en cuenta la relevancia ambiental de los efectos adversos previstos.

  • Verificar la correcta evolución de las medidas aplicadas en la fase de obras.
  • Seguimiento de la respuesta y evolución ambiental del entorno a la implantación de la actividad.

Estudios de Impacto Ambiental (EsIA)

¿Qué es un EsIA?

Un EsIA es un documento técnico que forma parte del proceso de evaluación ambiental y que se realiza para valorar los impactos ambientales sobre el medio ambiente de un proyecto o actividad.

Este documento es elaborado por parte del promotor del proyecto y contiene la información necesaria para evaluar los posibles efectos significativos del proyecto sobre el entorno. Su principal objetivo es adoptar las decisiones más adecuadas para prevenir y minimizar dichos efectos.

¿Cuál es el contenido de un EsIA?

¿Cuál es el contenido de un EsIA?

El contenido de un EsIA se estructura de la siguiente manera:

• Descripción general del proyecto: Objetivo del proyecto, localización, descripción detallada de las actividades asociadas al proyecto, descripción de materiales y recursos naturales utilizados, y descripción de residuos, vertidos, emisiones o cualquier otro elemento derivado de la actividad (ruidos, vibraciones, olores, emisiones luminosas, emisiones de partículas, etc.).

• Exposición de alternativas: Exposición de las principales alternativas al proyecto, incluida la alternativa cero o de no realización del proyecto. Se debe añadir también una justificación de las principales razones de la solución adoptada.

• Inventario ambiental: Descripción de factores como el aire, el agua, el suelo, la flora y la fauna, el paisaje, los espacios protegidos, la población o el patrimonio cultural, histórico y arqueológico. Se trata de una labor esencial para conocer y comprender adecuadamente el medio en el que se plantea el proyecto y deberá ser realizada por un técnico especialista.

• Posibles efectos y valoración de impactos: Evaluación, valoración y cuantificación de los efectos previsibles directos o indirectos de las actividades proyectadas sobre los aspectos ambientales indicados en el inventario ambiental.

• Medidas preventivas y correctoras: Medidas previstas para prevenir, reducir, eliminar o compensar los efectos ambientales negativos significativos determinados en el punto anterior.

• Programa de vigilancia y de seguimiento ambiental: Sistema que garantiza el cumplimiento de las medidas preventivas, correctoras y compensatorias especificadas en el EsIA, tanto en la fase de ejecución como en la de explotación del proyecto.

• Resumen del estudio y conclusiones.

UNE-EN ISO 14.001:
Sistema de Gestión Ambiental

La norma UNE-EN ISO 14.001 es una norma internacional que contiene los requisitos necesarios para implantar un sistema de gestión de ambiental y proporciona la posibilidad de demostrar el desempeño ambiental de una organización.

La norma UNE-EN ISO 14.001 es certificable y se puede implementar en cualquier organización que busque en su trabajo diario la minimización de los impactos ambientales asociados a su actividad y el cumplimiento de la legislación ambiental vigente.

La norma UNE-EN ISO 14.001 aporta una vertiente verde a las organizaciones, siendo considerada uno de los principales mecanismos competitivos a día de hoy en el mundo empresarial.

UNE-EN ISO 9.001:
Sistema de Gestión de la Calidad

La norma UNE-EN ISO 9.001 es una norma internacional que contiene los requisitos necesarios para implantar un sistema de gestión de la calidad y proporciona un método de trabajo excelente para la mejora de la calidad de los productos y servicios, así como de la satisfacción del cliente.

La norma UNE-EN ISO 9.001 es certificable y se puede implementar en cualquier organización independientemente del tamaño o sector. Además, las normas como la UNE-EN ISO 9.001 se convierten en una ventaja competitiva para una organización ya que muchos clientes prefieren empresas comprometidas con la calidad.

Esta página utiliza cookies y otras tecnologías para que podamos mejorar su experiencia en nuestros sitios:   
Privacidad